viernes, 18 de septiembre de 2009

SOLEDAD DESPOBLADA.


Me gusta volver a Muñoz Rojas, sus libros acompañan cuando la noche se queda quieta sin reparos.

"... Nuestra soledad se empobrece con los años. Antes era una soledad rica y poblada. Andaba uno en su interior y siempre hallaba consolaciones. Ahora está el interior oscuro y no nos atrevemos a abrir las puertas de sus moradas por temor a hallarlo vacío. Nada peor que la soledad despoblada, nada peor que los pasos en el vacío. Es oscuro el interior, oscuro a estas alturas y la soledad es peor que la soledad. No suena. Es una sorda soledad. Los consuelos de antes, la ilusión de la poesía, la seguridad o la esperanza de que algo divino, distinto, nos esperaba, el temblor del descubrimiento, la ternura esperada al paso. Vacío, vacío. Y hueco. Y el paso resonando en lo vacío, lo hueco, lo oscuro. ¿ Adónde?

Aquí, en mi Casería. donde habité en tan pobladas soledades, donde siempre hallé un refugio a la soledad estéril, ahora temo a la soledad. No me responde. Me deja y me encuentro de verdad solo.

Días hermosos y sequísimos. Nunca vi belleza más cruel. Afila los perfiles de las sierras, los deja en una desnudez impasible, se extiende en su durísima belleza por las tierras sin esperanza de ternura, sin que acuda un asomo de verde a enternecerlas. Belleza inmutable, un rodar impasible de días con cielos limpios, con una sequedad casi de alma, cernida sobre todo "

José Antonio Muñoz Rojas.

No hay comentarios: