jueves, 25 de febrero de 2010

ACARICIADORES DE LOS FORASTEROS.


Mi paisano, el gran escritor Vicente Espinel, tiene en su " Vida del escudero Marcos de Obregón" un canto a Barcelona. Nunca entenderé por qué no se lee y estudia en Ronda a Espinel; autor que tiene calle principal, colegio, restaurantes y, hace años, bar de romerías varias.

" Llegamos a España, desembarcamos en Barcelona, ciudad hermosa en tierra y en mar, abundante de mantenimientos y regalos, que, con oír hablar en lengua española, parecían más suaves y sustanciosas; y aunque los vecinos tienen nombre de ser un poco ásperos, vi que a quien procede bien le son apacibles, liberales, acariciadores de los forasteros; que en todas las repúblicas del mundo quieren que el forastero, con el buen proceder, obligue a la amistad. Si el que no es natural parece humilde y vive sin perjuicios de los naturales, tiene granjeada la voluntad de todos, porque su buen término con la soledad que padece, engendran piedad y amor en los pechos naturales "

Vicente Espinel (1550-1624)

Escucha:Pablo Casals "O vos omnes"

1 comentario:

Ula dijo...

Me ha emocionado este post.Cuando al dejar Londres, tras partir de mi Córdoba, aterricé en Barcelona, creyendo que (en 1976) era el lugar idóneo para una chica que había estudiado turismo y venía de Londres donde había pasado dos años.
Así que obtuve trabajo, buenas amistades, aprendí muchas cosas y fui tratada maravillosamente bien, sin tener que ocultar mi origen andaluz, y con mi acento. Es una ciudad muy elegante, aunque yo adoro Madrid, donde viví 20 años.
Magnífico Pau Casals.
No pasan los siglos para sentir, como con el rondeño Espinel.
Me hubiera gustado vivir en el siglo de oro y haber sido hombre.
Un saludo.