martes, 6 de julio de 2010

UN SILENCIO AFINADO...


La primera vez que estuve en El Escorial, me quedé paralizado. Descubrí un mundo de piedra y paisaje que siempre me había buscado. Era otoño y el tiempo se quedó detenido, detenido como aquellos recuerdos que viven sin relojes ni llamadas.

" Isinuar... Sugerir... Sugestionar...

Que una piedra, o un rincón, o una luz, o un contraste reaviven una acción que se quebró en su tiempo. Que una fuentecica, una línea arquitectónica, un silencio afinado y expectante compongan una pretensión jamás sospechada. Que una pintura, un mármol, una madera preciosa, una tela estofada consigan valorar un sentimiento desconocido antes. A insinuaciones, a sugerencias, a sugestiones habla El Escorial. Con insinuaciones, con sugerencias, con sugestiones tiene siempre El Escorial hecho añicos su silencio... "

Federico Carlos Sainz de Robles y Correa (1898-1983)


1 comentario:

Anónimo dijo...

A mi me pasó algo muy similar