lunes, 7 de marzo de 2011

CRITILO Y ANDRENIO.


Fue castigado por la Compañía de Jesús cuando publicó "El criticón" . El prepósito general ordenó vigilar a Baltasar Gracián en estos términos : " Conviene velar sobre él; mirarle a las manos, visitar de cuando en cuando su aposento y papeles, y no permitirle cosa cerrada en él ".

En " El criticón ", nos da una visión de la sociedad y de las costumbres mendiante diálogos entre Critilo y Andrenio. Me encanta su obra y me impresiona su actualidad.

" Llegaron a una gran plaza embarazada de infinito vulgo, muy puesto en expectación de alguna de sus necias maravillas, que él suele admirar mucho.

- ¿ Qué querrá ser esto?- preguntó Andrenio.

Y respondiéronle :

- Tened paciencia y tendréis ciencia. Así fue que poco a poco vieron salir bailando y brincando sobre una maroma un monstruo que en la ligereza parecía un pájaro y en la temeridad un loco. Estaban los que le miraban tan pasmados cuanto él intrépido; ellos temblando de verle, y él bailando porque le viesen.

-¡ Brava temeridad!- Exclamó Andrenio-. Sin duda que éstos primero pierden el jucio y después el miedo. A pie llano no llevamos segura la vida, y éste la mete en precipicios.

-¿ De éste te espantas tú ?- le dijo el cortesano.

-¿ Pues de quién, si de éste no?

- De ti mismo.

¿ De mí, y por qué ?

-Porque es niñeria esto respecto de lo que por ti pasa. ¿ Sabes tú dónde tienes los pies? ¿Sabes por dónde caminas?

-Lo que yo sé es- replico Andrenio- que no me metiera allí por todo el mundo, y éste, por un vil interés, se expone a tan grande riesgo (...)

-Dime , ¿ No caminas cada hora y cada instante sobre el hilo de tu vida, no tan grueso ni tan firme como una maroma, sino tan delgado como el de una araña, y aún más, y andas saltando y bailando sobre él? (...) Créeme que todos los mortales somos volatines arriesgados sobre el delgado hilo de una frágil vida: con esta diferencia que unos caen hoy, otros mañana"

Baltasar Gracián ( 1601-1658 )

( Foto de August Sander )

1 comentario:

Ula dijo...

A este aragonés, ingenioso y provocador de la sonrisa, lo empecé a tratar con interés tras engancharme a Schopenhauer, Borges, algunos franceses y, también gracias al psicoanálisis: "un grano de audacia con todos es importante cordura" (Oráculo manual).
Aunque lo siguieran de cerca las reglas jesuíticas, su arte trascendió y aquí está para disfrutar y aprender.

Con este post me engancha hoy, Almirante, a D. Baltasar.

Saludos.